Siempre me encantó eso de aprenderme los guiones de las pelis, de ponerme en la piel del protagonista o, de incluso reírme o llorar con él por ser capaz de contagiarme cada una de sus emociones…

 

Desde muy pequeña estudié teatro… eso que en un principio te “llama la atención” pero que con los años te das cuenta de que no puedes vivir sin ello…

 

Llega tu mayoría de edad y tienes que decidir qué carrera estudiar, elegir aquello que realmente te llena como persona, esa “cosa” que quieres ser de mayor… Después de mucho pensar me decidí por Comunicación Audiovisual… debo reconocerlo, no me atreví a adentrarme de lleno en ese mundo tan mágico y tan especial como es el de la interpretación.

 

Lo que sí comprendí en esos cuatro años de carrera es que me había formado como una profesional del medio, y que una vez visto “lo que hay detrás” estaba preparada para descubrir “lo que hay delante”, delante de ese medio pequeñito capaz de mover el mundo, de mover sentimientos y de crear ilusiones…

 

Mis padres siempre me enseñaron que la esencia en una persona debe estar en la humildad y en la constancia… Puede que el poder vivir de la interpretación sea algo improbable, casi imposible, pero inevitable que lo vaya a intentar hasta el final…

 

Me llamo Vanessa Pámpano Márquez, tengo 23 años y sí, pertenezco a ese mundo de locos sin remedio tocados por la necesidad de ACTUAR…